Cuando quieres viajar a otro país, planificas todo con antelación hasta que llega el día. Bueno, si eres un viajero solitario, puede ser que no lo planifiques tanto. ¿Y si quieres viajar con un menor de edad? ¿cómo es? Sencillo, dependiendo de la edad que tenga, pensarán algunos. Pero si el niño con el que quieres viajar, quiere viajar está de acuerdo, pero el padre no, ¿qué puedes hacer? bueno, te contaré como lo tuvimos que hacer. Yo soy la madre, mi hijo tiene trece años, quería viajar con él y mi esposo. El padre de mi hijo no quería que viajase, la única vía era una demanda (se puso en mayo 2023) para poder salir del país. Demanda que duró más de ocho meses, meses de angustia, meses de preocupaciones, porque dependes de un juez para poder viajar con tu hijo a otro país que es mejor, para lograr oportunidades, lograr darle un futuro mejor. Nos enfrentamos al sistema judicial de Chile, por no decir nefasto, un sistema apolillado con tantos huecos que la impotencia de no poder hacer nada, solo esperar y esperar me desvelaron más de alguna noche. Vamos a empezar cuando iniciamos la demanda, contratamos un abogado explicamos la situación, adjuntamos pruebas y se presentó en el juzgado, esperamos tres meses para la primera audiencia, (en agosto) para mi sorpresa duró menos de 20 minutos, solo tuve que repetir mis datos que ya estaban en conocimiento en los documentos, puede ser esto es para que el juez sepa que yo existo y no soy un robot o no lo sé, pero no se hizo nada más, la jueza ofreció si podíamos llegar a un acuerdo con la contraparte pero no se pudo llegar a ningún acuerdo, según el abogado lo llamó para ofrecer un acuerdo pero no se pudo. En esa misma semana volvimos a ir al juzgado solo para decir que no se llegó a acuerdo, duró un poco más de 20 minutos también. 

Luego llegó el momento más terrible de esa segunda audiencia nos fijaron una fecha para la audiencia de juicio ya para debatir y demostrar las pruebas etc, la fecha para el 12 de enero de 2024. Casi sentí que todo había terminado, que nunca podría viajar, si todo se dilataba más pasaría casi un año más sin poder lograr una autorización para salir del país con mi hijo. Después de ese día me obsesioné con encontrar algo que pudiera salvarnos para adelantar esa fecha, busqué una página donde salían todas las leyes de Chile actualizadas, leí devorando cada palabra como si tuviera una examen o algo así. El abogado que contratamos, no hizo nada literalmente aceptaba muy bien esa fecha tan lejana aunque sabía que mi interés era lograr viajar lo antes posible, tanto leer encontré una ley que regulaba los procesos judiciales, los plazos para dar audiencias etc, y fue cuando leí que incluso en audiencias preparatorias que son las primeras audiencias que se hacen el juez podía pasar de inmediato en la misma audiencia preparatoria a audiencias de juicio que sería, presentar pruebas, o sea empezar a confrontar etc, entonces me pregunté porque el juez no hizo eso en la primera audiencia o en la segunda cuando no hubo acuerdo entre las partes que era yo y el padre de mi hijo, porque fijar una fecha tan lejana? para entorpecer, para no trabajar para que? me preguntaba. Y cuando leí que por ley debían dar 30 días como máximo para fijar una fecha posterior a la primera audiencia, para la segunda casi me dio un infarto, lo peor es que si no cumplen con eso no hay un castigo serio. Anote todo y fui a la corte de apelaciones a preguntar qué podía hacer si podía reclamar aplicando lo que encontré, si existía algún órgano que fiscalice estos procedimientos, el caballero que me atendió me dijo que no es fiscalizador la corte de apelaciones, pero si existía un correo electrónico en el cual podia mandar mi reclamo formal, pensé que eso no serviría para nada, pensé que era un calmante solamente pero lo intenté, redacté todo. También le pedí al abogado que intentara pedir una nueva fecha, la respuesta que le dieron fue que del 12 de enero se adelantaba para el 3 de enero. Casi sin esperanza, después de más de un mes me respondieron del correo electrónico que me había dado ese caballero que trabajaba en la corte de apelaciones, y me notificaron que habían tomado mi reclamo y me adelantaron la audiencia para el 27 de noviembre. Ya era un poco mejor. Entonces mi reclamo sirvió más de lo que hizo el abogado, pensé que ¿para que le pagamos?. Pero ya a estas alturas no lo podiamos cambiar, pero se me escapaba un detalle que en Chile todo niño que va a declarar a un juzgado debe tener un curador o sea un abogado que defienda sus intereses, y eso es lo más importante porque si no tienes abogado para tu hijo la audiencia no se concretará, o pedirán por las salas del juzgado si hay alguno, suena insolito pero eso me dijeron, entonces la misión era encontrar un abogado para mi hijo, aunque el juzgado designa uno, pero justo ese abogado estaba con licencia medica por un accidente que tuvo, entonces designaron a otro, pero ese otro no daba ninguna contestación de que se presentaría a la audiencia, nuestro abogado nos dijo “es que los abogados de los niños son así, solo sabemos si van a llegar el mismo día de la audiencia”, yo quedé pensado si eso era una broma, ojala, o hubiera sido pero no la era, entonces yo averigüé en la institución en la cual trabajaba ese abogado curador, para saber si él iba a presentarse o no, además tenía que entrevistar a mi hijo antes de la audiencia, y faltaba menos de una semana para el gran día, el estrés, los nervios, fueron muy grandes, se preguntarán porque faltaba una semana y aun no sabíamos si ese abogado de niños iba a presentarse o no, porque el juzgado demoró en designar a otro, así que le pedimos a nuestro abogado particular que contactara a ese abogado curador de mi hijo, no tuvimos respuesta de nuestro abogado perdimos un día, así que al día siguiente tomamos un uber, y nos fuimos al lugar de trabajo del abogado curador, nos atendió una mujer que tambien era abogada, y no era muy simpática, le explicamos la situación, y la importancia de que su compañero diera alguna respuesta si se va a presentar o no, ella se molestó, dijo que ella no atiende sin cita, y que ella lo unico que sabe, es que su compañero está con un permiso, pero no sabía hasta cuando. Quedamos helados con las esperanzas más idas que nunca si él no iba quién iría, y le preguntamos y si el juzgado te llegará a notificar a ti, ¿tú podrías aceptar ir para representar a mi hijo?, dijo que ella no sabía que a ella no la han notificado de nada, le dije bueno, en realidad han notificado a esta institución, entonces puedes ir tú o tu compañero, ella me dijo que estaba ocupada en una reunión, y le dije amablemente te puedo esperar, y así tú podrías revisar tu agenda y ver si es que podrías representar a mi hijo, para que no perdamos la audiencia por falta de un curador, y nos dijo que no, que ella está ocupada. Entonces pensé en esa frase de Chile “los derechos de los niños es lo más importante, un niño debe ser oído, ante un juzgado”, entendí que eso es más falso que cualquier otra cosa. Con casi sin tiempo, y tristes volvimos a casa, nuestro abogado particular contestó que intentaría contactar al curador, al final yo mandé un correo a la directora general de ese establecimiento llamado “la casa del niño” donde trabajaban dos abogados curadores, y mágicamente después de ese correo, el curador que debía representar a nuestro hijo, nos contestó que él sí iría a esa audiencia del día 27 de noviembre de 2023, que él tenía un permiso, pero que era justo hasta el 20 solamente. Nos fijó una entrevista con mi hijo dos días antes de la audiencia de juicio, la entrevista duró 5 minutos. Y por segunda vez nos preguntamos junto a mi esposo ¿para que le pagamos a nuestro abogado particular? Ni idea, otra vez resolvimos por nuestra parte el problema, bueno, llego el gran día de la audiencia, el curador se presentó online, fue algo chistoso, supuestamente ellos se pueden presentar online, porque tienen muchísima sobrecarga y así pueden asistir a todas las audiencias, pero lo que yo vi, fue otra cosa, pero bueno, ahí estaba yo dentro de esa sala enfrentándome con el padre de mi hijo, la jueza antes de empezar la audiencia de juicio preguntó si podíamos llegar a un acuerdo entre nosotros otra vez, y estratégicamente igual nos convenía, porque nos habían designado dos horas para finiquitar esa audiencia y, posiblemente, no alcanzaríamos, y se dilataría más, y eso no queríamos quizás nos daban para dos o 6 meses más dependiendo de cuánto faltará por terminar, y como eso no lo podíamos controlar nosotros sino la jueza, lo único que podíamos hacer, era intentar llegar a un acuerdo, sentí una actitud machista por parte de la jueza responsabilizándome del porque mi hijo no quiere ni estuvo interesado, en ir de visitas a la ciudad donde vivía su padre. Le dije que si hace un año desde que me cambie de ciudad su padre no había ido ni una vez a visitarlo que obviamente mi hijo no le interesa ir a verlo, o algo así traté decir, pero la jueza me hacía sentir que era mi culpa y al padre de mi hijo no lo responsabilizaba de nada. Por cómo evaluaba la situación no me quedó más remedio que aceptar que solo por un año puedo salir del país con mi hijo, nuestro abogado particular no trató de pedir más tiempo, nada. Solo habló lo justo, después descubrí que las nuevas pruebas tampoco subió a la página del juzgado para que luego la jueza pudiera verlas en la audiencia, eso lo descubrí porque el abogado del padre de mi hijo lo dijo en la audiencia, y al revisar después en linea la causa en el portal, vi que estaban las mismas pruebas iniciales que eran más débiles, y el remate de todo este chiste, porque solo fue un chiste esa audiencia. Fue que la jueza casi a punto de dar el veredicto final dijo, “ah se me olvidaba, ¿el curador que opina de esto?” y es así como terminó ese proceso. Fatídico, así es para sacar a un menor de edad del país si el padre no te autoriza por voluntad.